Tristeza por el fallecimiento de Seba Acosta, guitarrista de Abelardos
El fundador de la banda comodorense que este sábado iba a festejar 25 años de trayectoria, atravesaba un delicado momento de salud y estaba internado en el Hospital Regional. Tenía 43 años.
Durante la madrugada de este jueves, falleció el guitarrista y fundador de una de las bandas históricas de Comodoro Rivadavia. Sebastián Acosta, quien formó Abelardos entre fines de la década del ‘90 y el año 2000, estaba internado en el Hospital Regional, atravesando un grave cuadro respiratorio desde hace semanas y en los últimos días, en redes sociales estaban pidiendo cadenas de oración.
Sus restos serán velados este jueves 17 a partir de las 12:30, en la sala B de Hipólito Yrigoyen 361, mientras que el sepelio se realizará el viernes 18 a las 11:00, en el Cementerio Oeste.
Por esas injusticias de la vida, Seba no pudo cumplir su sueño de festejar los 25 años de Abelardos, un recital que estaba programado para este sábado 19 en el Socios Fundadores, en el que iban a reencontrarse muchos de los ex integrantes de la histórica agrupación de rock, para brindar un show que prometía ser inolvidable. El mismo ya había sido postergado una semana atrás, debido a las complicaciones que atravesaba el músico.
“SERÍA MUY AMBICIOSO PEDIR MÁS”, DECÍA HACE OCHO MESES
De todas maneras, Acosta se sentía más que orgulloso y agradecido por todo lo transitado con la música. Así lo manifestaba ocho meses atrás, en diálogo con PATAGONIA EN ESCENA, en la nota publicada el 22 de agosto de 2024, antes de la presentación oficial de “Mantra”, el último EP de Abelardos, editado en 2023 y grabado en los estudios “Romaphonic”.
“Sería muy ambicioso pedir más. Gracias a Dios, he podido tocar en todos los escenarios de Comodoro: en el Huergo, en el Predio, en el Socios, en los barrios. Desde escenarios enormes, hasta escenarios pequeños. Lo que siempre buscamos, es hacer una canción que represente a mucha gente. Creo que eso lo hemos cumplido. La gente se adueñó de la banda, se adueñó de las canciones. Es una energía recíproca que no tiene fin. Pedir algo más, sería pedir de lleno. Hemos visto generaciones. Pibitos que nos iban a ver cuando recién arrancábamos, hoy son padres y están llevando a sus hijos a ver un show nuestro”, fueron sus palabras en aquella oportunidad.
Queda su música, esa que lo llevó a “jugar en Primera”, como reconoció al recordar el último trabajo de su banda junto a Guido Nisenson, ingeniero de grabación de los grandes del rock nacional. Quedan esas canciones que trascendieron sus acordes, para que lleguen al alma de quienes lo recordarán con una sonrisa.